Las lentes de contacto esclerales multifocales son utilizadas para corregir la presbicia o vista cansada donde hace unos años era casi impensable. Se pretende conseguir con estas lentes establecer patrones de adaptación que determinan que diseño de lente es mejor para cada paciente, personalizando cada lente de contacto para cada usuario, puesto que los pacientes présbitas suelen ser pacientes con córneas irregulares o pacientes con ojo seco al que el uso de lentillas le irrite la córnea.

Orto-k es un método cada vez más común que consiste en la reducción o eliminación temporal de los efectos de la visión. Es un tratamiento reversible y seguro, que permite compensar tu graduación mientras duermes. Este tratamiento permite tener una buena visión durante todo el día sin necesidad de someterse a cirugía, ni utilizar gafas. Casualmente la ortoqueratología se inició para un único tratamiento, corregir la miopía, pero actualmente con los nuevos avances es utilizado tanto en hipermetropía como astigmatismo hasta un cierto límite de graduación.

Durante la edad escolar se pueden encontrar casos en que la miopía está desarrollándose a una velocidad no deseada, debido al estrés que sometemos nuestro sistema visual. Numerosos estudios demuestran que diseños especiales como la ortoqueratología, las lentes de contacto con enfoque periférico y las lentes de contacto bifocales de anillo concéntrico son uno de los tratamientos para el control de la miopía.

Los niños se quejan de dolores de cabeza, visión borrosa y fatiga pueden sufrir de una incapacidad para cambiar su enfoque de su escritorio a la pizarra en el aula. Las lentes progresivas su parte superior está ideada para permitir una visión óptima en el plano lejano, la intermedia para ofrecer buena visión en la zona media y la inferior para proporcionar nitidez en el plano cercano.

Salir a la luz del sol brillante puede ser un infierno cuando se usan lentes de contacto, que tienden a hacer que muchas personas sean ultrasensibles a la luz fuerte. Ahora, gracias a la aprobación de lentes de contacto reactivos a la luz por parte de la Dirección de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) es posible que ya no tengamos que tener ojos llorosos mientras buscamos nuestras gafas de sol. La FDA aprobó lentes de contacto blandos fotocromáticos que se oscurecen automáticamente cuando se exponen a la luz ultravioleta.

La Diabetes es uno de los trastornos metabólicos más comunes a nivel mundial. El método estándar de control de la diabetes es mediante un dispositivo conocido como glucómetro que, a través de una aguja, transfiere la sangre y realiza una lectura del nivel de glucosa en ésta. Se ha estudiado la posibilidad de analizar otros fluidos corporales como alternativa para la medida de glucosa en sangre, siendo la lágrima el más aceptado. Por ello, se ha pensado en el uso de lentes de contacto, pues se encuentran de manera permanente en contacto con la lágrima. El diseño de este tipo de LC se basa en un sensor de glucosa miniaturizado situado entre las dos capas de hidrogel que componen la lente.

El glaucoma es una de las principales causas de pérdida de visión en el mundo. Esta enfermedad, cuyo síntoma principal es el aumento de la Presión Intraocular (PIO). Actualmente se ha desarrollado otro método menos invasivo para el control de este parámetro, una LC hidrofílica con un sensor incorporado capaz de detectar cambios de la presión intraocular.

Los lentes de contacto como vehículos para la administración de fármacos serían particularmente útiles para las enfermedades crónicas que requieren tratamiento terapéutico a largo plazo, tales como el glaucoma, la degeneración macular relacionada con la edad, ojos secos, las alergias y la inflamación crónica. La tasa de liberación del fármaco podría ser controlada mediante la alteración de las propiedades de la película de polímero y la lente utilizando un proceso de infusión.

Realizar fotografías tan solo pestañeando es otro de los retos que Google se ha planteado conseguir en un futuro no tan lejano. Este invento consistiría en una microcámara instalada en una lentilla, que iría vinculada a un Smartphone o una tablet de manera inalámbrica. Además de tomar imágenes, esta lente inteligente podría llegar a tener múltiples usos innovadores que facilitarían la vida a personas invidentes o con la visión muy deteriorada, quienes “podrían cruzar de manera autónoma una calle ya que las lentes podrían saber si un coche se aproxima y avisar al invidente mediante señales acústicas del teléfono”, por ejemplo.

Científicos estadounidenses y finlandeses han puesto en marcha un proyecto por el que tienen como objetivo crear unas lentes que proyecten imágenes. Según los precursores de la iniciativa, se trata de “un primer paso en el camino para conseguir transmitir información en tiempo real directamente a nuestro campo visual, sin necesidad de cables”. Este prototipo ya ha sido probado en conejos, para determinar si posee algún defecto perjudicial para la visión. Las pruebas realizadas no produjeron ningún daño ni en la córnea ni en ninguna zona del ojo del animal, ni abrasión visible.